SANTA TERESA 2.O: NOTA DEL ANTOLOGIZADOR

El presente compendio de Teresa de Ávila es una antología singular donde, al sacar de contexto sus escritos, ellos se cargan de otros significados y resonancias diversas. Es, también, un homenaje lúdico y sonriente a una autora prolífica e intensa, tercamente fiel a sí misma, que, en pleno siglo XVI, transcribía lo que ella, en sus propias palabras, consideraba "noticias del cielo".



"Esto" forma parte de la TRILOGÍA CANALLA, junto a SAN AGUSTÍN y SAN JUAN DE LA CRUZ. Advierto que tales compendios resultan tremendamente irregulares entre sí y he allí donde reside parte de su encanto y peculiar perversidad. El prodigio masscult y tercermilenista de la web nos permite esta versión 2.0 El lector puede acceder directamente a cada antología, pulsando sobre el título citado previamente.


martes, 8 de febrero de 2011

Y + AVERNO

"Me parecía la entrada a manera de un callejón muy largo y estrecho, a la usanza de un horno muy bajo y oscuro y angosto. El suelo me pareció de un agua como lodo muy sucio y de pestilente olor, y muchas sabandijas malas en él. Al cabo estaba una concavidad metida en una pared, a manera de una alacena, adonde me vi meter en mucha estrechez.

Todo esto era deleitoso a la vista en comparación con lo que allí sentí. Esto que he dicho va mal encarecido".
(Teresa de Ávila)

domingo, 6 de febrero de 2011

“Porque así como (…) no entiende cómo crece ni sabe cómo mama, que aun sin mamar ni hacer nada muchas veces le echan la leche en la boca así es aquí, que totalmente ella no sabe de sí ni hace nada, ni sabe cómo ni por dónde (ni lo puede entender) le vino aquel bien tan grande. Sabe que es el mayor bien que en la vida se puede gustar, aunque se junten juntos todos los deleites y gustos del mundo”.
(Teresa de Ávila)

sábado, 5 de febrero de 2011

+ AVERNO

"Después de mucho tiempo que el Señor me había hecho ya muchas de las mercedes que he dicho y otras muy grandes, estando un día en oración me hallé en un punto toda, sin saber cómo, que me parecía estar metida en el infierno. Entendí que quería el Señor que viese el lugar que los demonios allá me tenían dispuesto, y yo merecido por mis pecados. Ello fue en brevísimo espacio, pero aunque yo viviese muchos años, me parece imposible olvidárseme".
(Teresa de Ávila)

viernes, 4 de febrero de 2011

“Cuando estaba en aquella ebriedad se ve toda empapada en aquella innumerable grandeza divina”
(Teresa de Ávila)

EL AVERNO

"¿Qué será de la pobre alma que, acabada de salir de tales dolores y trabajos como son los de la muerte, cae luego en ella? ¡Qué mal descanso le viene! ¡qué despedazada irá al infierno!; ¡qué multitud de serpientes de diferentes maneras!; ¡qué temeroso lugar!; ¡qué desventurado hospedaje!"
(Teresa de Ávila)
“Quiere el Señor que, sin pensarlo, entienda que está con Él y que sólo trague la leche que Dios le pone en la boca y goce de aquella suavidad; que conozca que le está el Señor haciendo aquella merced y se goce de gozarla; aunque no quiera entender cómo la goza y qué es lo que goza.”
(Teresa de Ávila)